lunes, 1 de junio de 2009

Candidatura de Lavín a la Quinta Región Costa

QUINTA COSTA: Clave en la disputa Presidencial
Por Jorge Montecinos
La llegada de Joaquín Lavín, a la V región, responde a dos escenarios muy concretos. Uno, de carácter coyuntural, plegado de desconfianza hacia Sebastian Piñera, por su impredecible manera de ejercer el poder político. Dos, la impronta de la UDI, en su camino por transformarse en un partido popular.
La UDI, considera que el haber ganado dos circunscripciones electorales claves, como Viña del Mar y Valparaíso, en las últimas elecciones municipales, le otorga la posibilidad cierta de fortalecer un polo político electoral estratégico en la V región.
Es una apuesta que tiene sentido, al considerar que las comunas de Viña del Mar y Valparaíso, tienen una importancia vital para cualquier proyecto político. En Valparaíso, se concentra el poder legislativo, y además, es una comuna popular, que se conecta con el eje populista del proyecto de la UDI. Por su parte, Viña del Mar, es el polo de representación simbólica de los sectores más acomodados de Chile, y por tanto, el motor del proyecto político- simbólico de la UDI.
¿Qué se propone la UDI con la llegada de Joaquín Lavín a la Quinta Costa?
Todo hace indicar que se conjugan dos aspectos claves. Uno, que tiene relación con las desavenencias en la campaña presidencial y algunas diferencias concretas con el candidato Sebastian Piñera. Dos, aquellos elementos más estratégicos, y que tienen relación con el crecimiento partidario de la UDI, y su proyecto de “partido popular”.
Respecto de la carrera presidencial de diciembre próximo, sin duda, será una contienda dura y muy cerrada en su votación electoral. Las comunas de Valparaíso y Viña del Mar, por la impronta electoral favorable a la UDI, puede ser claves en inclinar la balanza presidencial a favor de Sebastian Piñera. Vale decir, el fortalecimiento de la Circunscripción Quinta Costa, - mediante la figura de J. Lavín- responde también al propósito de lograr un triunfo presidencial, cuyo margen de obtención o derrota, puede estar determinado por unos 30.000 o 50.000 votos, como factor de triunfo.
Está estrategia disminuye al máximo el riesgo de la UDI, en su apuesta política. Por una parte, no abandona del todo a Sebastian Piñera, pero le resta a su vez el protagonismo total. Por la otra, asegura su proyecto de “partido popular”, al fortalecer su presencia en dos distritos claves. Además, ante un eventual fracaso de candidato presidencial de RN, la presencia de Joaquín Lavín, le permite obtiene un senador, que juntos a la bancada más conservadora de la UDI, defenderá aspectos claves de la Constitución de 1980, que amplios sectores desean cambiar, en el gobierno futuro.
J. Lavín, procuraría resguardar los valores más conservadores del cuerpo legislativo y además, se transformaría en un figura clave, para garantizar la cohesión de los congresistas de la UDI para el próximo gobierno. De ganar el abanderado de la Coalición por el Cambio, la UDI, mantiene su presencia senatorial y se acrecienta la figura de Joaquín Lavín en el Congreso. En todo caso, en el UDI, nada es al azar. Todo responde a ciertas lógicas del poder, ante el liderazgo impredecible, pragmático y en ocasiones personalista de Sebastian Piñera.
Lavín escapó de Piñera a la Quinta Región
Por Jorge Gómez Arismendi
La eventual candidatura de Joaquín Lavín, por la Quinta Región Costa, más bien parece esconder una táctica de éste, para desligarse diplomáticamente de la candidatura presidencial de Sebastián Piñera, y no tanto una pretensión electoral personal.
Cuando Pablo Longueira se desligó por la prensa del comando presidencial de Sebastián Piñera, la señal era clara: apoyaba la candidatura del empresario, pero dejaba clara su distancia política con éste.
Esa distancia, que quedó en clara evidencia en 2007 en torno a la discusión del salario mínimo ético, parece no ser exclusiva del senador, sino también de otros miembros importantes de la UDI, que aunque no la hacen tan explícita como Longueira, si la dejan clara en discusiones privadas. Eso se notó en la demora que pusieron los gremialistas en cuanto a darle el apoyo de manera oficial y definitiva a la candidatura de Piñera.
Lo cierto es que las diferencias de estilo y de hacer política entre Sebastián Piñera y líderes importantes de la UDI, parecen no desaparecer a medida que se acercan las elecciones presidenciales de diciembre, sino más bien agudizarse.
La ahora eventual candidatura de Joaquín Lavín por la Quinta Región Costa parece confirmar ese ambiente tenso pero solapado. En este sentido, más bien parece una táctica del ex alcalde, para desligarse diplomáticamente de la candidatura de Sebastián Piñera, y mantener su independencia y capacidad de discreción política en un espacio propio como lo es una senatoria. Eso sí, sin generar daños a la Alianza y sus pretensiones de llegar a ser gobierno.
En el fondo, algunos altos líderes UDI quieren evitar ser cooptados y absorbidos por RN en caso de llegar al gobierno, al verse en la obligación de constituir una coalición gobernante. Por lo mismo, durante el cónclave gremialista, Lavín fue enfático en decir que el gobierno de Piñera debería tener el sello de la UDI.
En este sentido, la UDI apoya a Piñera en base a una ética de resultados (ganar las elecciones en diciembre y con ello llegar al gobierno) y no en base a una ética de principios. En esa línea, Longueira fue claro en declarar en la prensa que Piñera era el vehículo para que el proyecto gremialista llegara a la Moneda, y que prefiere más ver a Lavín como presidente que como senador o ministro de Sebastián Piñera.
Lavín siendo más realista que Longueira, claramente ve que la senatoria le ofrece un espacio mucho más propicio para mantener un punto de poder propio e independiente, pero manteniendo los apoyos netamente políticos con Piñera. No así un puesto como ministro.
En lo anterior, probablemente también incide el que Lavín tampoco olvida que hace cuatro años, el consejo general de RN le quitó el respaldo como candidato de la Alianza, proclamando a Piñera, y que este último le negó la posibilidad de ir a primarias. Por lo tanto, el riesgo de sufrir una “desconocida” por parte de Piñera es real. Muerte política segura para Lavín si la sufre siendo ministro del empresario.

No hay comentarios:

Publicar un comentario